El Real Madrid no moverá ficha este verano por Mbappé ni por Haaland. Por mucho que el delantero francés insista en salir del PSG y que la agente del noruego haga guiños al Real Madrid, el club blanco sólo se plantea un gran fichaje este verano, el de Jude Bellingham.
Si el año pasado por estas fechas el Real Madrid mantenía contactos más que avanzados con Mbappé, al que había apalabrado, y con Haaland, que tenía al club blanco como el primero en su lista de prioridades, este año todo es distinto. Ni el francés ni el noruego están en la órbita del Madrid al menos para este verano. Al club blanco le da igual que Mbappé ahora quiera irse de París y que Rafaela Pimienta, la mujer que dirige la carrera de Haaland, diga que el Madrid «es un sueño».
El Real Madrid lo fía todo este verano a la llegada de Jude Bellingham, el joven centrocampista del Borussia Dortmund por el que pugnan todos los grandes de Europa. En las oficinas de Valdebebas tienen muy caro que el fichaje del inglés es «prioritario» y que el club blanco va a echar el resto para lograr la contratación de uno de esos futbolistas que debe echarse a la espaldas al Madrid en la próxima década.
Todo a Bellingham
Para el verano de 2023 el objetivo es Bellingham, además de reforzar la plantilla en los puestos donde hacen falta recambios: llegarán un lateral derecho y un delantero, además de Fran García y algún canterano que suba del filial de Raúl. Y todo con las renovaciones de los siete futbolistas que acaban contrato todavía en el aire.
No será hasta 2024 cuando el Real Madrid se plantee si Mbappé o Haaland tienen cabida en un proyecto al que se incorporará el joven Endrick, que ya tendrá los 18 años preceptivos para poder salir de Brasil. Si nada cambia, Mbappé podría quedar libre en junio de 2024 y Haaland activar su cláusula de salida del Manchester City. Pero para eso todavía queda mucho tiempo. Puede que demasiado.